¿Has escuchado alguna vez la palabra “ojo de pollo”? Seguro que sí, pues es una afección dermatológica muy habitual entre la población. 

¿Alguna vez te has preguntado qué tipo de pie tienes? A simple vista puede parecer que todos los pies son iguales pero aunque parezcan idénticos no lo son. En el mundo no existen dos personas que pisen de la misma forma, ni dos pies iguales, es más, ni los pies de una misma persona lo son. 

Llegó septiembre y con ello la vuelta a la rutina con las clases escolares y los preparativos para el nuevo curso (ropa, uniforme, zapatos, etc…). Ahora es también un buen momento para realizar una revisión podológica a los más pequeños de la casa, para confirmar el estado de salud de sus pies. 

Durante el verano todos queremos lucir unos pies bonitos y arreglados, pero… ¿A quién no le ha pasado que despuésés de tantos meses ocultando nuestros pies bajo los calcetines y los zapatos cuando por fin llega el calor y el momento de lucirlos al aire libre nos damos cuenta de que nuestras uñas y nuestros pies no tienen el aspecto que deseamos?

Con la llegada del calor viene el cambio de armario, toca decir adiós a las botas, botines y a todos los zapatos cerrados para dar paso a los zapatos abiertos que nos llevan a mostrar nuestros pies. También llega el momento de ir a la playa o a la piscina y de lucir los pies descalzos. Pero puede ser que nuestros pies no estén del todo preparados para este cambio tan importante y drástico ¿Tienen tus pies durezas o callos? ¿Están tus talones agrietados? 

En este post os vamos a hablar de las lesiones dérmicas más frecuentes en nuestros pies: los callos y las durezas.