Es una técnica invasiva mediante agujas para el tratamiento del síndrome del dolor miofascial y sus puntos gatillo. Los puntos gatillo puede ser activos o latentes: los activos generan dolor referido espontáneo y los latentes no. Debido a ello, el tratamiento de los PGM activos puede reducir dolor a distancia del punto donde se realiza la función. Con todo ello, además reduce la debilidad y las restricciones de movilidad.

En PODOclínic Castellón trabajamos de la siguiente forma:

  1. Primero se realiza una desinfección de la piel con clorexidina. El terapeuta siempre llevará guantes.
  2. Se palparán manualmente los puntos dolorosos del paciente.
  3. Cuando se hayan encontrado, se realizará una entrada lenta hasta llegar a los a puntos encontrados. Cuando estemos en él se realizará la técnica de Hong: Entradas y salidas rápidas para conseguir las reacciones de espasmo y buscar dolores a distancia.
  4. Al finalizar retiramos la aguja y realizaremos presión en pinza para evitar edemas.
  5. En nuestra consulta, realizaremos estiramiento pasivo y pases con Spray frio para reducir el dolor post-punción.